miércoles, noviembre 18, 2009

En tiempos lejanos..

Erase una vez un joven que apareció en la vida de una jovencita. Su aparición fue repentina y sin advertencia. La joven lo recibió amablemente y lo acogió en sus pensamientos. El joven aceptó gustoso la morada y dio pie a que naciera algo. Ese algo creció. El joven se marchó.


11 comentarios:

B. dijo...

No tan lejanos quizás.

Anónimo dijo...

Que fuerte! Se marchó? De donde era? Era un extranjero? Es un cuento? Los cuentos son color de rosa.

Yo creo que regresará.

Anónimo dijo...

Tal vez aparecieron mutuamente en la vida del otro.
Tal vez las mejores cosas de la vida inician repentinamente.
Tal vez la suerte es así.
Tal vez no es suerte, es una oportunidad que ambos aprovecharon.
Tal vez además de recibirlo, le ha salvado la vida, porque una vida sin ella no es vida.
Tal vez no se marchó.

Anónimo dijo...

Que cruel sería si se hubiera marchado.
A veces los seres no se marchan, a veces creen no ser dignos de algo tan bello y creen que deben lograr metas para ser dignos de regresar.

Anónimo dijo...

Que cursi, pero:
La jovencita no solo debe estar en sus pensamientos, sino en cada sentido.
Al observar la luna, al escuchar las melodías, al sentir el viento, al oler la mañana, al degustar cada alimento.

march dijo...

es un final inconcluso todavia no se ha acabado...porque "y fueron felices para siempre".. demasiado trillado y ordinario para mis gusto

saludos daya!

Anónimo dijo...

Yo estoy casi seguro que regresará porque los dos piensan en el otro aunque ninguno de los dos lo diga.

dayanna* dijo...

Último anónimo, ¿a caso eres el jovencito?

Anónimo dijo...

¿Quién es el último anónimo?
¿Quien es el jovencito?
¿En quién piensas?
¿Quién piensa en ti?
¿Tu crees que alguno de los dos lo diga?

Anónimo dijo...

Si necesitas hablar de dicho joven... pronto estaré en tu lugar de origen.

Creo no conocer a esta persona y si quieres omitir nombre o apodo no hay problema.

Sabes que cuentas conmigo por más lejos que estemos...

... y sobre todo sabes quien soy.

Amante de la carretera :)

Anónimo dijo...

¿Qué es peor?

Las palabras que nunca se dicen o las burdas palabras que se dicen.

¿Qué pasaría si el jovencito te dijera que eres como el chocolate, como la sal y el azúcar o como el sol o como todos ellos?

¿Por qué eres así?

Como el chocolate porque eres irresistible.

Como la sal y el azúcar porque eres lo que le da sabor a la vida.

Como el sol porque eres la fuente de energía no solo de los seres vivos del planeta, sino del universo.