lunes, noviembre 26, 2007

Free Hugs Campaign

Un amigo alguna vez me recomendó un video acerca de una campaña de abrazos que se llevó a cabo en Australia y que ha tenido un alto impacto en diferentes partes del mundo.

Por medio del grupo estudiantil CUNAE del ITESM Campus Guadalajara, sí el mismo que representa y que es el Grupo Águilas de Campus Guadalajara, hicimos una campaña de abrazos dentro de la escuela que duró tres días y tuvo muchísimo éxito.

El motivo de mi escrito no era hablar de la campaña de abrazos, ni del video, eso era como para contextualizar pero por alguna razón extraña me perdí en el escrito. La razón verdadera era hablar acerca de los abrazos, esas formas tan gratas de regalar cariño con el cual podemos volver a sentir, volver a querer vivir y volver a ser felices.

En verdad un abrazo es la mejor terapia para todos los males, nunca le he tenido fe a la medicina halópata y después de descubrir el poder de los abrazos me declaro fan de ellos definitivamente y los adopto como mi mejor cura.

Los dejo con el video de la campaña de abrazos de Juan Mann, mismo video con el que inicio este escrito, que alguna vez me recomendaron y cabe resaltar que nunca vi hasta hoy. De paso les dejo una foto de la campaña de abrazos que hicimos aquí.

Los resultados se miden en felicidad, osea no tienen medida. Si de las cientas de personas que me tocó abrazar hice a una feliz, cambié su perspectiva del día o bien le provoqué una sonrisa, con eso tengo.

jueves, noviembre 22, 2007

Fraude


Fui escéptica, quise creer en las instituciones de mi país y en el intento de democracia que se suponía teníamos. Promoví el voto para otros candidatos y argumenté que en verdad AMLO no era una opción y que todos los mexicanos teníamos que darnos cuenta y votar por el "menos" peor. Hoy me arrepiento, no sé si lo quisiera tener como presidente, pero de lo que sí estoy segura es que no es un peligro para México, es un señor respetable y el manejo de la situación política que tuvo después de las elecciones del 2006 dejan un sentimiento profundo de admiración.

Nunca creí que lo diría, pero hoy quisiera haber anulado mi voto en protesta al mal manejo de campañas e información, así como a las irregularidades cometidas durante todo el proceso desde que empezaron las pre-campañas políticas hasta después de que terminó el juicio por contar voto por voto.

Vale la pena la película, no es amarillista y presenta una realidad que existe y está latente y que muchos mexicanos han preferido olvidar.

sábado, noviembre 03, 2007

Velador de sueños

Pasábamos tanto tiempo juntos, recuerdo esas tardes después de la escuela que llegabas, te tirabas en tu cama y me abrazabas. Siempre me gustó más tu época de secundaria: pasabas más tiempo en casa y por lo tanto más cerca de mí; para cuando pasaste a prepa y decidiste ir a la escuela en otra cudad tenía que esperar más horas para verte y a veces incluso semanas enteras.

Recuerdo el día que llegué a tu casa, tú te encontrabas en la playa disfrutando tus vacaciones de Semana Santa y yo arribé a un cuarto recién pintado todo de blanco, me recibió tu mamá. A los dos días decoraron tu cuarto: pintaron las paredes con distintos colores que le quedaban al edredón nuevo que arribó conmigo, le dieron vida y magia a ese lugar tan especial para ti. Tengo tan grabada tu cara al entrar a tu recámara, no podías creer lo increíble que se veía y lo mucho que te había gustado. Nuestra amistad comenzó desde el primer momento en que me viste, yo te observaba desde que entraste y lo seguí haciendo mientras admirada recorrías con tus ojos cada rincón; al acercarte a la cama me tomaste, te acostaste boca arriba y me abrazaste: desde ese momento supe que seríamos grandes amigos, cómplices y compañeros de vida.

Pasamos un sin fin de noches juntos: con calor, con frío, cansados, sin poder dormir; las circunstancias nunca importaron, sólo éramos tú y yo compartiendo el sueño.

Siempre me sentía honrado cuando llegaban tus amigas y lo primero que hacían era acercarse a tu colección de cojines que me hacía compañía en la cama; tengo grabadas en mi mente tus palabras: “ese es mío, no lo toquen, es mi compañero de sueño”. Me apodaban chorizo, tubito, cojincito, entre otras cosas; mucha gente te preguntó por qué tanto el afecto a un cojín en forma de cilindro de tela azul con verde. Tu respuesta siempre era “porque me encanta dormir con él”.

Nuestra relación era perfecta, o por lo menos así lo creía yo. Te acompañé a diferentes partes y velaba tu sueño por las noches. Me abrazabas mientras dormías, cuando te recostabas o sentabas en tu cama a hacer diferentes actividades. Tengo guardadas lágrimas tuyas, risas, palabras, abrazos, caricias y un sin fin de recuerdos. Creía firmemente que nuestras vidas estarían unidas para siempre hasta que llegó la gran fecha esperada: todos los demás cojines y tus pertenencias morían de miedo por no saber a quien escogerías para acompañarte en tu nueva etapa y a quienes dejarías abandonados hasta vacaciones. Siempre me sentí seguro, pensaba que después de tantas cosas y una amistad tan sólida sería yo el primero en ser empacado para viajar contigo. Ni hablar, decidiste evolucionar y empezar una vida llena de nuevas aventuras, en esa evolución ya no estaba yo, buscaste independencia: querías dormir sola.

Al principio estuve muy triste, te extrañaba mucho y tu cuarto dejó de ser ese lugar cálido y lleno de cariño para convertirse en un lugar solo y oscuro. En las vacaciones la vida volvía a tu recámara y la alegría a todas tus pertenencias que dejaste; volvíamos a pasar tiempo juntos y sentía que mi vida era plena de nuevo. Cuando terminaron tus vacaciones y tuviste que volver a tu nuevo hogar creí que me llevarías esta vez, quizá la primera vez estabas agobiada con tantas cosas que tenías que llevarte; no sucedió así, te despediste y me dejaste en casa de tus papás.

Supe que ahora duermes con alguien más, un oso, alguien que te acompaña todas las noches en Guadalajara y que es tu nuevo cómplice, sé que a él tampoco lo prestas y que lo quieres mucho. La verdad, me da gusto, por lo que me han comentado eres feliz y te cuida muy bien; no puedo negar que primero me entristecí al saber que había sido desplazado pero después entendí: yo fui el primero, el que te acompañó dentro de tu crecimiento y pertenezco a tu mundo en Sonora y él es parte de tu vida en Jalisco.

Sabes que aquí te esperaré, cada vacaciones volveremos a pasar tiempo juntos, en verdad espero con ansias esos días.