Los días se escurren como agua. Las semanas transcurren en segundos. Los meses pasan a alta velocidad. Sé que extrañaré la dinámica, que me acordaré con nostalgia, que me preguntaré cómo pasó tan rápido. Faltan diez meses, suena a mucho, realmente es muy poco.
Debo confesar que quiero que termine. Soy feliz, pero veo el último día como la gran meta. Quizá a futuro piense ¿por qué no duró más? Pero hoy despierto y digo un día menos.
Es bonito, gratificante, excitante... pero también es tedioso, frustrante y desesperante. No es la mejor combinación, pero es vivible.
Terminará. Lo disfrutaré hasta el último día... y cada día pensaré que ya casi termina.
Debo confesar que quiero que termine. Soy feliz, pero veo el último día como la gran meta. Quizá a futuro piense ¿por qué no duró más? Pero hoy despierto y digo un día menos.
Es bonito, gratificante, excitante... pero también es tedioso, frustrante y desesperante. No es la mejor combinación, pero es vivible.
Terminará. Lo disfrutaré hasta el último día... y cada día pensaré que ya casi termina.